martes, 31 de mayo de 2016

@Juliapomares, y la cuestión de la Soberanía en la Democracia.




7 claves sobre el voto el voto electrónico.

Respeto intelectualmente el trabajo de @Juliapomares, pero si se toma a la ligera su artículo, se corre el riesgo de dar “argumentos técnicos” a la Republica “lombrosiana”; versión actualizada del Despotismo Ilustrado de las elites anti-populares.

Desde el fracaso de Alfonsín se justifican las derrotas con el tan meneado Clientelismo, los pauperrimos arreados como ganado por los punteros, que medran de las “Cajas”.

Hoy, aquí y ahora, ese mismo clientelismo pero SIN las Cajas del Estado Nacional y de la PBA; gana holgadamente si va unido, y hasta puede llevar los 3 Senadores Nacionales si se divide en 2 ofertas enfrentadas; como en 2005.

De allí que los analistas pautados expresen la ilusión de que sean 3 o más fracciones  las que se presenten en las próximas elecciones.

Justamente para que Cambiemos (PRO + UCR) logre 1 Senador o Senadora.

En cuanto al argumento sobre los Partidos políticos que no son capaces de fiscalizar, ¿hablamos de Partidos Políticos o de PyMES?

Si no se es capaz de lograr un “voluntario” de cada 350 inscriptos o 280 sufragantes; ¿qué verosimilitud de lograr votos disponemos?

¿Las Gacetillas del Comité Central del Partido en defensa de la Supremacía del Macho sobre la Hembra?

En las elecciones de 2015 el Presidente de FIAT fiscalizo en La Matanza, y  estamos hablando de uno de los Ceos más importantes de nuestro país.

En la España del 20D, dos emergentes que hace 2 años no existían, o era solo regional en Cataluña, se presentaron en todo el territorio y lograron 5 y 3.5 millones.

Con “voto correo” y SIN “cuarto oscuro”, las boletas se retiraban de una mesa a la vista de todos.

Si “eso” sucediera en Argentina el griterío seria colosal.

La Democracia en el siglo XXI es de Partido de Masas y no de Partidos de Notables.


Porque, o dejamos la “Soberanía” a  “las clases productivas y prosperas”, o damos la "delegación del poder del Estado a la representación popular"

Súbditos o Ciudadanos es la clave en los Sistemas electorales, como sucedió con las diferencias de patrimonio, raza, educación o genero.



Carrio, la Ilustrada, tutela la minusvalía de los “pobres”…

"Creo que sólo “las clases productivas y prosperas” van a sacar a los pobres de la pobreza y este es el compromiso moral de las clases medias argentinas.
Somos nosotros los que tenemos que liberar a los pobres y no ellos liberarse, porque ellos están esclavos del uso político"



…o tiene razón las “heredera de Weimar”.

La Corte Constitucional alemana acaba de dar un duro golpe al voto electrónico al prohibir su uso.
Sus defensores no pudieron convencer a los jueces de que el conocer el resultado electoral un par de horas antes o la exactitud en la contabilización de los votos compensa el peligro de softwares manipulados para generar un fraude electoral masivo; o que el ahorro de sueldos -al disminuir el número de empleados electorales- compense el hecho de que se debiliten los controles estatales en el proceso electoral.


Pero, lo que resultó determinante es que el voto electrónico -argumento válido también para el voto por Internet- debilita el carácter público de la elección, y así el votante común no puede comprender, "sin conocimientos especiales previos" y sin ayuda de especialistas, cómo es el proceso por el que se recibe y contabiliza su voto y tampoco tiene garantías de que el voto emitido sea captado de la misma manera por la computadora.

La Corte Constitucional alemana afirma algo que muchos políticos y consultores olvidan:
"En la República la elección es cosa de todo el pueblo y asunto comunitario de todos los ciudadanos" y que la función del proceso electoral es la "delegación del poder del Estado a la representación popular".
Por ello, su legitimidad no puede ser sacrificada en función de la comodidad de funcionarios o la ansiedad de políticos por conocer los resultados.

La sentencia tiene una amplia aceptación en la opinión pública.
Esto se explica por el hecho de que en pocos países la administración pública y privada está tan informatizada como en Alemania y es precisamente este conocimiento de lo que una computadora puede y lo que no puede hacer, lo que genera la demanda popular de saber qué sucede dentro de la computadora electoral.
No es casual que quienes impugnan sean especialistas en elecciones y en software.


Esto resulta un golpe muy fuerte para aquellos que intentan encontrar soluciones "mágicas" disfrazadas de tecnología para compensar una institucionalidad debilitada.
Un procedimiento no soluciona problemas estructurales.