domingo, 4 de octubre de 2015

El Fin de la Era de la Ilusion.


“El diario La Nación, en una de sus facetas (liberal social, casi un liberalismo de izquierda), junto a la prensa progresista, espalda con espalda, resisten el horror a un tiempo que creen que viene: un nuevo desfasaje entre mundo e ideología en la cabeza de la clase política”.




Para Calvo, “el voto peronista es muy estable, sociodemográfica y políticamente” pero esa estabilidad y fortaleza en algunas zonas como el GBA o el norte argentino no está dada por un sentimiento de pertenencia partidaria sino por la percepción de gobernabilidad que garantizan los dirigentes peronistas.


“En Argentina no hay ningún determinante de voto que sea más importante que la percepción de capacidad de gobierno, muy por encima de la ideología, de la expectativas de redistribución y de las redes políticas”, explicó.


Una evidencia de eso, para el autor de Anatomía política de twitter en Argentina (Capital Intelectual), es la diferencia entre quienes se identifican en las encuestas como peronistas (cerca de un 20%) y los votos que suman los candidatos que se proclaman peronistas en las elecciones nacionales (en torno al 70-80%).